miércoles, 17 de junio de 2015

EL EXTRAÑO SUCESO DEL VALLE


A las 06:46 horas del jueves, Gervasio un habitante de la zona de Cartes dice haber visto algo extraño en el valle, algo que lo asusto y lo hizo correr para dar la alarma. Pero no fue el único que vio algo raro, si el que más lo vivió en persona. La historia fue difundida hasta llegar a nuestros oídos. Nuestro equipo entonces decidió dirigirse rápidamente al lugar del suceso. Ya en la zona preguntamos a la gente, nos aconsejaban que hablásemos con Gervasio que era quien podía decirnos todos los detalles de lo ocurrido.
Acercándonos a su casa una de las más lejanas al poblado, estaba en la falda de una montaña del valle y nos percatamos que tenía el pico más alto. Por fin llegamos y llamamos a la puerta. Nos abrió Gervasio un hombre bajo de aspecto campechano, él muy amable nos animó a entrar con cierto aire de nerviosismo. Nos sentamos  y nos pusimos con la entrevista:

-         -  Hola Gervasio, ¿Cómo se encuentra después de lo sucedido?

-         -  Que le voy a contar me encuentro asustado como un flan después de ver lo que vi aquel día.

-          - ¿Qué hacia ese día?


-          -Comenzaba a dar de comer a los animales y había sacado a las ovejas para subir al monte a que pasten. Vi que el día estaba turbio y avecinaba tormenta. ¡CAUENIOSLE, jamás me espere ver aquello! Cosa así de las 06:46 ya estaba yo con las ovejas subido en el monte, comenzó a chorrear y a tronar. A mí me daba igual tenía un chubasquero de plástico de esos de Decátlon. Como si nada….buff un silencio… que no se escuchaban truenos ¡Y ni siquiera se veían rayos! Seguidamente apareció aquello…

-         -  ¿Nos puedes decir o explicar lo que vio?


-         -  A ver…, bajo del cielo un objeto que flotaba con forma de escudo, se paró separado al monte más o menos a la altura donde estaban mis ovejas pastando. Se asustaron. Encima de ese escudo enorme había una figura que parecía humana, no lo veía bien, así que me acerque. ¡Ya lo vi yo mejor, si! Tenía un traje ceñido como con chapas metálicas y era como humano con pelo rubio corto. Toda su figura desprendía luz.

-         -  ¿Qué hacía?


-          - Se le veía preocupado, estaba como intentando arreglar el cachivache que tenía en la mano. Yo lo asemeje entre un hacha o un martillo.

-          - ¿Cuánto tiempo estuvo o cuánto tiempo pudo verle?



-         -  Desde que bajo creo que tardo unos dos minutos hasta que arreglo el chisme parece. De sopetón me miro, parece que se percató en ese momento de mi presencia.

-          - ¿Qué hizo?


-         -  Cagarme de miedo. El cogió el chisme y lo golpeo flojo contra el escudo. De debajo salieron pequeños rayos que chamuscaron el prado. Después él con la otra mano hizo un movimiento y por arte de magia el escudo con él se elevaron entre las nubes desapareciendo.

-          - ¿Qué paso después?


-         -  Bueno, ¡Yo clavao en el sitio! No me podía mover y las ovejas dispersas. Y… ¡IOSLE! Un rayo salió de las nubes viéndose en todo el valle haciendo retumbar la tierra. Salí escopetado hacia el pueblo. Subí de nuevo al sitio acompañado por la gente  para enseñarles el sitio chamuscado. Algunos me dijeron  que algo raro vieron aunque otros no lo creían. Yo dije: ¡La verdad absoluta no existe, pero esto es absolutamente cierto!

-        -   Pasados los días; ¿Volvió al lugar de los hechos?


-         -  ¡Claro! Tengo que sacar las ovejas a pastar, pero ahora subo acompañado de mi sobrino Pepín.

-          - Por ultimo ¿Ha vuelto a pasar algo?


-          - No. Desde aquello ya no. Los vecinos nos preguntamos que pasara con la próxima tormenta.

-         -  Un placer conocerte Gervasio, muchas gracias por atendernos y responder a nuestras preguntas. ¡Espero que nos volvamos a ver!
-     
           - Gracias a ustedes, placer el mío. ¡Vayan con Dios! 




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